A lo largo del año, más de 42 instituciones educativas fueron visitadas y 3.630 estudiantes participaron de las actividades impulsadas por los equipos territoriales. En cada encuentro, niñas, niños y adolescentes pudieron interiorizarse sobre el funcionamiento de la Línea, sus alcances y en qué situaciones pueden recurrir a este servicio gratuito, confidencial y disponible las 24 horas.
Las propuestas tuvieron como objetivo central fortalecer el conocimiento de las infancias y juventudes sobre sus derechos, brindar información clara acerca de los canales de protección disponibles y promover espacios de escucha y participación dentro del ámbito escolar.

Durante las visitas se desarrollaron charlas, talleres y dinámicas interactivas, adaptadas a los distintos niveles educativos. Entre los ejes trabajados se destacan: el derecho a la protección, el buen trato, la convivencia, las rutas de acceso a la Línea 102, la identificación de situaciones de vulneración y la orientación sobre cómo y cuándo pedir ayuda.
Las jornadas contaron con una activa participación de estudiantes, docentes y equipos directivos, quienes valoraron la iniciativa y resaltaron el rol del servicio como dispositivo fundamental para fortalecer la red de protección comunitaria.